Para el músico, no todo en la vida es Música; para el matemático, no todo en la vida son las Matemáticas; para el soldado, no todo en la vida es guerra; mas para el filósofo, todo en la vida es la Filosofía

POSTMODERNIDAD (...o no)

http://marcelogfernandez.blogspot.com.es/2012/02/septima-parte-posmodernidad.html
Postmoderno
No sé si conocéis a alguno de los dos. Os pongo en situación.

Santi Rodríguez
Santi Rodríguez
Santi Rodríguez es un humorista conocido, aparte de por sus apariciones en El Club de la Comedia, por su papel de "Frutero" en la serie Siete Vidas. Siempre me ha parecido un hombre completamente en sus cabales y una buena persona. Era seguidor suyo en tuiter. Digo "era" por el motivo de esta entrada.

Shangay Lily
Shangay Lily
Shangay Lily es un actor, cabeza visible del movimiento queer en España, conocido por sus apariciones televisivas. Personalmente, no lo conocía.

A lo que iba:

Hace cerca de dos horas estaba echando un vistazo a tuiter cuando veo que Santi Rodríguez anunciaba en su cuenta de la red social del pájaro azul que cerraba la misma. No entendía por qué y vi que era por una discusión que venía trayendo desde ayer con Shangay Lily (@shangay). No sé cómo empezó todo, pero, según he podido averiguar revisando una larguísima lista de tuits, un tal @EnEstadoDGuerra, autor del blog con ese nombre, amenazó de muerte a Shangay en un tuit que no encuentro; Santi, en lugar de condenar esa amenaza, se limitó a decir que el actor tampoco era ningún santo, lo que provocó que este tachara inmediatamente a aquel de (cito textualemte) "cristofascista".

El humorista eliminó el tuit de marras para evitar malentendidos (que, a mi parecer, no deberían de haber surgido), haciendo gala de sus ganas de evitar la polémica innecesaria. Shangay se tomó esto como una afirmación de su teoría y dio cuenta de ello tuiteándoselo a Santi. No sería la primera vez que deja ver su disconformidad ante una actitud homófoba (cosa que le honra, por hablar claro y a la "cara"), pero creo que su ensañamiento con Santi Rodríguez fue desmesurado, en primer lugar porque él no dijo nada grave acerca de nadie y en segundo lugar porque no se ensaña tanto con otros tuiteros como el mismo @EnEstadoDGuerra, quien desea abiertamente la muerte de Shangay.

Me temo que la actitud de Santi de responder, en la medida de lo posible, a todo el que le escribe y de evitar formar follones ha sido lo que ha hecho que esto acabara así. Él respondía, cosa que otros no hacen, y acabó pagando la rabia, hasta cierto punto obvia, de Shangay.

¿A qué viene esto? Sencillo. A que me toca las pelotas la gente que se cierra en su punto de vista, de un modo absolutamente consciente, y se vuelve incapaz de ceder ante nada. Le ha tocado a Shangay Lily cargar con el peso de ser el ejemplo, lo siento.

Me cuesta asimilar que gente con capacidad mental suficiente como para formarse una mentalidad fuerte y coherente se ponga a la defensiva a la mínima ante temas que le afectan de cerca, ya sea a su situación personal o a una ideología con la que esté comprometida. ¿Qué se gana con eso, además de enemigos? ¿De qué sirve atacar a alguien que no condena algo que uno cree que es condenable? ¿Acaso no denunciar es defender?

En este mundo postmoderno nos encontramos literalmente de todo, por eso hay que andar con un cuidado extremo por lo que se dice o se hace, porque siempre va a saltar alguien que te acuse de no apoyar su justa causa. Defendemos la pluralidad anulándola: dejamos que cada uno piense como quiera, pero censuramos cuando se piensa diferente. Es la paradoja de la postmodernidad, somos a la vez lo uno y lo otro, el sí y el no, todo y nada, somos un vaso con agua y aceite que no deja de ser agitado queriendo obtener una mezcla homogénea que jamás aparecerá.

Centrándonos en el caso concreto del que os hablo, Shangay, preocupado a más no poder por su condición sexual, parece que se lanza al ataque en cuanto ve un pequeño indicio de ofensa al colectivo al que pertenece, pero siempre abanderando el respeto y la libertad de expresión. ¿Soy el único que ve la contradicción de acusar a alguien de tener exactamente la misma actitud que tú, solo que en sentido contrario? Sé que al menos gente de mi entorno también lo ve, lo malo es que somos pocos. No pretendo ir de profeta, pero es que me parece algo básico para la convivencia el evitar el conflicto siempre que se pueda y el mantenerse expectante (que no apático) ante una forma de actuar que, en primera instancia, nos pueda parecer ofensiva. Sospechar antes de hacer nada y tener paciencia es lo único que pido.

...y, sin comerlo ni beberlo, caigo en el mismo error que critico: decirle a los demás que actúan mal por pensar que tienen la respuesta mientras pienso que yo tengo la respuesta. Dilemas... Ni frío ni caliente, pero tampoco tibio...

¡AAAH!

Por eso odio la época y la sociedad en que vivo, y por eso odio mi actitud. Y por eso también amo todo ello. Porque paso del tema y es lo que más me interesa.

En fin...